¿Sabes cómo hacer vino o tinto de verano? Te hacemos esta pregunta porque hoy queremos que conozcas un poco más de cerca cuál es el proceso que seguimos en nuestra bodega para que puedas disfrutar del tinto de verano que tanto te gusta.
Vamos a contarte cómo hacer vino desde el principio: los viñedos, el lugar en el que empieza todo. Después, te explicamos los pasos que sigue nuestro producto desde el viñedo a la botella. ¡Sigue leyendo para descubrirlos!
Los viñedos, el lugar en el que empieza todo
No podríamos hablar de cómo hacer vino sin hacer una mención de honor a nuestros viñedos. Tenemos la suerte de estar ubicados en un entorno que se caracteriza por la producción de vino. Además, cabe destacar que nos encontramos al lado de un paraje espectacular como son las Tablas de Daimiel.
En este entorno en el que vivimos, nuestro enólogo se encarga de la elección de los viñedos. Una vez que se escogen los adecuados, se evalúa el proceso de maduración y se identifica cuál es el momento ideal para realizar la vendimia y así coger la uva en su momento óptimo para su tratamiento posterior.
¿Cómo son las uvas que utilizamos en Sandevid?
En la realización de cualquiera de los productos Sandevid utilizamos uva tempranillo, que es la más noble de la zona en la que estamos situados.
La variedad Tempranillo es una de las variedades autóctonas más importantes de España. Aunque comenzó su cultivo en La Rioja, a día de hoy se ha extendido por todo el país y ya que cuenta con más de 200.000 hectáreas plantadas.
¿De dónde viene el nombre tempranillo? Es muy fácil, es la uva más temprana. Además es la que menos tiempo de maduración tiene de todas las variedades existentes.
Del viñedo a tu mesa, los pasos para hacer una botella de Sandevid
No podríamos hablar de cómo hacer vino sin contaros paso a paso el proceso que seguimos desde que tenemos la uva hasta que una botella de Sandevid está lista para llegar a tu mesa.
Las uvas entran en nuestra bodega, el equipo técnico se encarga de ver que todos los procesos se realizan correctamente: la molturación [el proceso por el cual se rompe la piel de la uva para obtener el mosto], separación, fermentación y, posteriormente, el control del vino obtenido para conservar su calidad.
Finalmente, al ser un producto elaborado a base de vino pero que tiene connotaciones de refresco, debe conservarse a una temperatura de seis o sietes grados. Es decir, más baja que la de un vino normal (aunque cada tipo de vino tenga su temperatura ideal). También es importante guardarlo en un lugar seco y fresco donde no le dé la luz, aunque para cualquier duda se puede consultar la etiqueta del producto.