Siempre es buen día para hablar de mujeres y vino, pero hoy aún más. El vino ha dejado de entender de géneros, no existen en el consumo ni en la profesión. Aunque generalmente siempre se ha asociado esta bebida con el hombre, las mujeres están cada vez más presentes.
Los cambios de roles, preferencias y costumbres han incrementado la participación de las mujeres en la industria del vino. Hoy ellas, han irrumpido en el mundo del vino con su propia visión, enriqueciendo la industria en los viñedos, en la producción y en el consumo. Cada día, encontramos a más mujeres asumiendo puestos de responsabilidad y perfiles tradicionalmente ocupados por hombres. Ya no resulta extraño encontrar mujeres enólogas (por cierto, ya os contamos en artículos anteriores qué es un enólogo, por si queréis refrescar la memoria) o sommeliers, puestos que hasta no hace mucho tiempo, les eran muy difícil de acceder. Actualmente, los roles están cambiando.
Las mujeres compran más vino que nunca y experimentan el placer de consumirlo con mayor conocimiento y frecuencia.
En Sandevid, queremos hacer un repaso por todas esas mujeres que lucharon rompiendo estereotipos y consiguiendo ser parte de la historia del vino. ¡Un brindis por vosotras!
Alexandrine Pommery
Alexandrine fue una visionaria en una época. Comenzó su andadura en la producción del champagne en 1958. Se trata de la creadora de grandes e importantes vinos, como el champagne extra sec y el brut nature.
Ella, percibió cambios en los gustos de la sociedad. Entendió que las personas demandaban sabores más concretos, por lo que impulsó la creación de vinos sin azúcares añadidos. Aunque en la actualidad existen una gran variedad de productos y bebidas bajos en azúcar, en ese momento supuso un cambio importante; ya que hasta en ese momento nadie había pensado en la ventaja que suponía elaborar vinos sin azúcares añadidos.
Françoise-Josephine de Lur-Saluces
Esta mujer francesa marcó precedentes en la historia del vino. Tras fallecer su marido, el conde Louis-Amédée de Lur-Saluces en 1788, tomó las riendas del viñedo Château d’Yquem. Trabajó en poner todo su esfuerzo y dedicación en hacer crecer su bodega, consiguiendo grandes resultados. Ella fue la causante de que el vino actual más conocido de Francia, Château, fuera reconocido a nivel internacional. Un legado reconocimiento que continúa, más de 200 años después.
Barbe Nicole Clicquot
Fue la única hija de uno de los viticultores más reconocidos del siglo XX: el barón Philippe de Rothschild. La baronesa vivó desde pequeña desagradables sucesos que marcaron su vida, como el secuestro y posterior asesinato de su madre por parte de la Gestapo. Nacida en 1933, esta valiente francesa, heredó la bodega de su padre tras su fallecimiento.
A lo largo de su vida dirigió tres viñedos de gran importancia en Burdeos, consiguiendo que su negocio basado en el vino doblara en ventas, convirtiéndose en una de las mujeres más importantes en la producción de vino.
Arianna Occhipinti
Esta viticultora italiana comenzó a elaborar sus vinos a principios de la década de los 2000 a partir de viñas abandonadas. Actualmente se encarga de cultivar en estos viñedos, variedades de uva autóctonas, hasta el momento muy desvalorizadas por los consumidores de vino. A partir de agricultura ecológica, ha conseguido crear su propia bodega, Arianna Occhipinti. Pese a sus poco más de 30 años es una de las mujeres que más personalidad y tendencia están marcando en el mundo del vino.
En Sandevid, tenemos muy claro que nuestro tinto de verano, sería imposible sin el esfuerzo, dedicación visión de nuestras compañeras. ¡Hoy y siempre, va por vosotras!
